viernes, 8 de octubre de 2010

OPINION UNIVERSITARIA


De la Psicología del sujeto de la historia a la del sujeto histórico.

Por: Francisco Quintanilla

Se ha llegado de nuevo a la celebración de una nueva Semana de la Salud Mental , semana en que se ubica la celebración del día Psicólogo(a); el año pasado, en el marco de celebración de la Salud Mental, se hizo referencia en varias ponencias y sobre todo en una, sobre el papel del psicólogo y de la psicología en realidades como las latinoamericanas, que desde la perspectiva de los aportes en este campo del Español nacionalizado Salvadoreño Ignacio Martín Baró, debe ser un papel de contribuir desde su especificidad a la liberación de los pueblos oprimidos, haciendo uso de los procesos de desideologización frente a los procesos ideologizantes que utilizan los que tiene el poder económico, político y social. Sin embargo, un año después de esas reflexiones la carrera de psicología aquí en la Facultad Multidisciplinaria de Occidente, parece no querer despegar, parece no querer iniciarse en la construcción del camino desideologizador, es decir, iniciarse en el camino de construir conocimiento científico que permita no sólo la explicación y transformación científica de las realidades salvadoreñas desde su especificidad, sino que además poner al descubierto las estructuras oscuras que funcionan para mantener y agrandar el abismo entre los propietarios de los medios de producción que cada vez son menos y más ricos y los marginados que cada vez son más y más pobres.

Iniciarse en este camino y por lo tanto en este andar, supone necesariamente, el revertir el camino equivocado que ha seguido la enseñanza y formación de las nuevas generaciones de psicólogos y psicólogas en toda la UES en general y particular en la FMOcc, es decir, supone revertir el camino de cómo se produce conocimiento científico, como lo han señalado varios pensadores latinoamericanos entre ellos Paolo Freire, Orlando Fals Borda, Ignacio Matín Baró, de que el camino correcto no es ir de la teoría a la realidad sino de la realidad a la teoría, no es ir de la teoría a la praxis, sino de la praxis a la teoría, no es ir de la reflexión a la acción sino de la acción a la reflexión.

La formación de las generaciones de psicólogos (as) actuales y pasadas ha sido siguiendo el camino de la teoría a la realidad (del que no han escapado la formación de otros profesionales). El seguir este camino ha traído consigo consecuencias negativas no sólo muy grandes sino que muy graves. Una de estas consecuencias es “formar” profesionales que apliquen a nuestras realidades teorías que han sido construidas, elaboradas no sólo en otras realidades, sino en realidades muy distintas y dispares, al aplicar a nuestras realidades teorías elaboradas en otras latitudes se va forzando a que las realidades salvadoreñas se ajusten a las realidades Estadounidenses o Europeas, adquiriendo formas en el pensamiento del estudiante y futuro profesional, que lo alejan cada vez más de una comprensión más profunda, objetiva y cuestionadora; una segunda consecuencia es que va conduciendo al futuro profesional de la psicología a que desarrolle una interpretación descontextualizada y atemporalizada de la realidad social que es histórica; una tercera consecuencia es que al seguir ese camino de la teoría a la realidad, lleva al futuro psicólogo(a) no sólo a tener una visión descontextuada y ahistórica de la realidad , sino que además, al no tener conciencia de su “formación” ni del tipo de técnica y saber que “domina”, se convierte en un instrumento mantenedor, reproductor y consolidador del sistema económico y social injusto; y por último el profesional de la psicología en lugar de construir conocimiento científico que ayude a desentrañar (desideologizar) las tramas estructurales oscuras e injustas de las realidades salvadoreñas, contribuye con su accionar consciente o no a la ideologización de las relaciones de dominación.

Revertir el camino que se ha seguido para la formación del futuro profesional de la psicología, supone también tener como el horizonte máximo las mayorías populares y como una de sus metas, el saltar de “formar” sujetos de la historia a la formación de sujetos históricos, es decir, saltar de la formación de profesionales de la psicología que siendo sujetos pasivos de los devenires y avatares de la historia, se conviertan en sujetos activos, que actúan sobre la historia y le den dirección y sentido, un sentido liberador de lo que oprime y reprime a las mayorías marginadas en pueblos como El Salvador.

Ignacio Martín Baró sostenía que el profesional de la psicología como profesional poco podía hacer para transformar la realidad social y económica que le circunda, su papel más bien debe orientarse a la transformación de la subjetividad social; podría parecer esto una psicología idealista, lo cual sería una interpretación equivocada de esta afirmación, ya que con esto Baró quería que el psicólogo (a) se diera cuenta que las transformaciones de la realidad histórica con sentido y con determinada dirección no ocurren en forma espontánea, sino que quien se encarga de darle sentido y dirección es el sujeto histórico , el cual es una integración del sujeto individual y colectivo, por lo tanto, si se quiere que el sujeto de la historia (individual y colectivo) se convierta por medio de la educación en sujeto histórico, es necesario e imprescindible actuar sobre su subjetividad para que descubra cuan capaz es de comprender y transformar su realidad, en este sentido no puede haber cambio en la historia si no hay un sujeto individual o colectivo que se haga cargo y se encarde de ese cambio.

En esta misma línea, otro gran pensador, Ignacio Ellacuría, desde la perspectiva de su pensamiento filosófico, sostenía que en la relación de lo objetivo con lo subjetivo, cuando se impone lo objetivo (dinámica de la realidad histórica) sobre lo subjetivo (dinámica del mundo interno del sujeto individual y colectivo) se cae en un estancamiento, no hay transformación , no hay cambio, no hay revolución; por el contrario, cuando lo subjetivo se impone en su relación a lo objetivo, es decir, cuando el sujeto incide como actor y autor sobre la realidad que le circunda, es que se impulsan las transformaciones , sobre todo las grandes transformaciones de la realidad histórica.

Cuando se impone lo objetivo a lo subjetivo, es cuando los sujetos individuales o colectivos se han convertido en simples sujetos de la historia, que padecen sus inclemencias pero no hacen nada por transformar lo objetivo; cuando lo subjetivo se impone a lo objetivo, es cuando el sujeto de la historia decidió dar el salto, para convertirse en sujeto histórico responsable de su propio destino individual y colectivo, responsable de darle a la sociedad nacional y mundial la dirección que se necesita para que los seres humanos sean progresivamente más libres; en consecuencia la libertad no se logra alejada y fuera de la acción, sino en la acción misma.

El salto de dejar de ser un sujeto de la historia para convertirse en sujeto histórico más que un acto de valentía, es dejar atrás un estilo de vida por otro que esté a la altura de los tiempos.

Dejar un estilo de vida que hace que los seres humanos sean cada vez más esclavos por otro que posibilita su liberación, es un camino que además de ser largo, es espinoso, es sumamente doloroso, dejar atrás algo que tiene cientos de años de existencia, es algo que lamentablemente no todos quieren emprender, prefieren seguir siendo esclavos sin tener conciencia que lo son o si tiene conciencia de que son esclavos, sentirse contentos de serlo.

¿Pero qué contribución puede y debería de dar la UES en general y la carrera de Psicología en particular en y para esta ingente tarea?, ya se planteó atrás que el sujeto histórico individual y grupal, es alguien que se forma por medio de la educación con todas sus formas de expresión, por tanto, las herramientas principales de la UES es la educación y la investigación científica; esta institución debería ineludiblemente contribuir a esa tarea histórica, pero lamentablemente, el papel de ésta en las dos últimas décadas ha sido para “formar” no sujetos históricos sino sujetos de la historia, sujetos que en muchos casos al ser simples contempladores de la realidad histórica se han vuelto cómplices por omisión de las dinámicas y contenidos negativos y perjudiciales que esta realidad adquiere y desarrolla en contra de la vida humana y de todo tipo de vida, en otros casos que no son pocos ha formado sujetos de la historia que se han vuelto coparticipes de los designios de la clase social que con su poder se ha apoderado de la dignidad de las personas marginas y excluidas, convirtiendo la dignidad en mercancía.

Pero ¿cómo es que la UES en general y la Psicología en particular, ha caído en este juego degenerativo de la dignidad humana, de formar no sujetos históricos sino sujetos de la historia?, pues basta con que los que trabajan y estudian en esta institución, se quiten la chaqueta partidaria y vean el nivel académico real en que se encuentra esta Sagrada Casa de estudio, que vean si los profesionales que han ingresado para trabajar en ella en el campo de la docencia en las últimas dos décadas ¿han ingresado por capacidad académico- científica o por el clientelismo barato, que los compromete a votar por quienes le dieron el trabajo, en las elecciones internas de las diferentes autoridades? , ¿Se moverán la UES y la FMOcc en su interior respondiendo a su propia naturaleza o se mueven reproduciendo la forma política oscura y sucia como se mueve la sociedad salvadoreña en las dimensiones económicas, política y social?, ¿tendrán la UES y la FMO un proyecto global de investigación científica y de proyección social que les permita ser ellas mismas sujetos históricos o son simplemente sujetos de la historia?; sólo las mentes débiles que han vendido su dignidad no querrán darle respuesta a estas y otras interrogantes que ponen en cuestión el estado actual de la UES en general y de la FMOcc en particular que en forma acelerada se han alejado de los escenarios salvadoreños y mundiales, alejamiento que hace que la Diosa Minerva se avergüence cada vez más de los hijos e hijas que ha estado pariendo y de los encargados de engendrarlos.

La UES-FMOcc debería dejar de ser una especie de laboratorio social donde lo que se ha estado formado, son sujeto de la historia, sujetos pasivos que no sólo padecen las inclemencias de la historia, sino que además las reproducen y han aprendido a vivir de ellas, quizás por esto no quieren revertir el desorden al interior de esta casa de estudios, desorden que se ha vuelto un orden.

La carrera de Psicología ha sido una de las carreras que más ha padecido las inclemencias de ese desorden, de los poderes oscuros que la han atomizado, la han fracturado, guiados por el horizonte “que dividiéndola es más fácil vencerla y doblegarla”.

En esta semana de la salud mental, en esta semana dedicada a los y las psicólogos (as), en esta semana dedicada a todos los estudiosos de la psicología, es importante que todos los implicados en esta disciplina, hagan una reflexión, no cualquier reflexión, sino aquella que les permita a todos hacer un ingente reparo sobre la situación de la sección de psicología en la FMO y sobre el salto que deben históricamente dar todos aquellos que realmente aman la psicología, no porque el amor a ella sea una finalidad sino porque el amor a ella es nada más un medio, una herramienta para contribuir a que la UES-FMO desde la psicología sea eficiente en su inserción en la realidad salvadoreña y contribuir a la liberación del pueblo salvadoreño de todo lo que lo oprime y reprime, es decir, el salto de dejar de ser sujetos de la historia para convertirse en SUJETOS HISTORICOS, sujetos históricos que deben comenzar a tomar las riendas del destino de estas hermosa y comprometida disciplina científica y no seguir permitiendo que esos poderes oscuros y fácticos continúen haciendo de la carrera de psicología y de este saber científico un simple títere.

Recuperemos la esencia y el destino de la Psicología, haciendo de ella una ciencia historizada, ya que un saber que existe fuera de la historia, es una ciencia peligrosa para el bienestar de la ingente mayoría o es una ciencia muerta; pero no se puede historizar si todos los que están implicados y vinculados en y con ella no se meten dinámica y comprometidamente en y con la historia. Una ciencia se historiza si es capaz por una parte de explicar la realidad y por otra, si es capaz de transformarla, sobre a favor de las mayorías marginadas, porque nadie puede hacer ciencia o producir cualquier otro saber formal al margen de la realidad, ni siquiera Platón que es clasificado como idealista, fue capaz de hacer filosofía al margen de los avatares de la vida y de la sociedad de su época, como algunos pretende hacer creer, de que son capaces hacer “ciencia pura”, alejados de una opción ideológica ante la vida y ante el mundo.

Para finalizar esta reflexión, termino haciendo uso de palabras del gran Mandela: estudiantes de psicología, compañeros de trabajo, señoritas y caballeros, mujeres y hombres, “sean dueños de su destino y conductores de su propia alma, no permitan que los poderes oscuros se apoderen de ellos como tampoco del destino y del alma de la carrera de psicología”.

¡Tengan todos y todas, una feliz y comprometida Semana de la Salud Mental con la vida y con la historia!

Santa Ana, 10 de octubre de 2010

1 comentario:

laury dijo...

es una buena reflexion:::
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡HAGO UN LLAMADO A TODOS LOS ESTUDIANTES DE PSICOLOGIA A LEER Y REFLEXIONAR SOBRE EL PAPEL QUE DEBEMOS JUGAR DENTRO DE ESTA REALIDAD!!!!!!!!!!!!!!