HACIA LA DEMOCRACIA UNIVERSITARIA
Ismael García C.
Es necesario recuperar la memoria histórica de las luchas heroicas del pueblo salvadoreño y de grandes universitarias y universitarios que enfrentaron la muerte por mejorar las condiciones de vida de la población y por el desarrollo de una universidad con proyección social.
En el año de 1963, la Sociedad de Abogados de Occidente, solicitó al Rector de la Universidad de El Salvador, Dr. Fabio Castillo Figueroa, la fundación de un centro universitario en Santa Ana, para que respondiera a la demanda de educación superior de estudiantes de la zona occidental de país. El 16 de julio de 1965, el Consejo Superior Universitario de la UES, autorizó la creación del Centro Universitario de Occidente, el cual se ubicó al final de la Avenida Fray Felipe de Jesús Moraga Sur. Las clases de las áreas comunes se iniciaron en mayo de 1966, y en 1971, se empezaron a impartir algunas carreras
completas. Como la UES, el CUO tenía una buena proyección hacia la
comunidad.
La Sociedad de Estudiantes del CUO (SECUO), se caracterizó por defender los derechos de sus compañeros, por proyectarse hacia la sociedad santaneca, por pronunciarse por el derecho a la educación ,superior – el cual se violentaba cuando intervenían la universidad o le negaban el presupuesto-, y por la defensa de los derechos de la
población, tal como lo hacía la UES.
Así como los sectores sociales populares eran reprimidos, también la UES fue clausurada y ocupada militarmente entre 1972 y 1973, tal violación de la autonomía universitaria culminaba en saqueos y asesinatos. Tras la nefasta administración del CAPUES se encontraron cadáveres enterrados en el campus de la unidad central. En 1979, Félix Antonio Ulloa fue electo Rector de la UES. En 1980 la UES fue
intervenida nuevamente; el 28 de octubre de 1980, el rector Ulloa, quien impulsó que la UES funcionara en el exilio y se negara a morir, fue asesinado por paramilitares.[.
Tras la reapertura de la UES en 1983, se hizo esfuerzos de recuperación. La SECUO estaba desintegrada y dirigentes de carreras humanísticas la reconstituyeron en l986; algunos de estos líderes sufrieron cateos en sus viviendas, persecución o cárcel. En ese entonces la sociedad de docentes de la universidad era ADUES. Desdeesa época se aspiraba a que el CUO se convirtiera en Facultad Multidisciplinaria de Occidente, de tal manera que se contará con un Decano con representación en las instancias de gobierno universitarias.
Para la ofensiva guerrillera de 1989, la UES fue intervenida por los militares y una vez más se vio obligada a funcionar temporalmente en el exilio.
Tras la firma de los Acuerdos de paz, en 1992, el CUO pasó a ser Facultad Multidisciplinaria de Occidente, a partir del 4 de junio de ese año. La representación estudiantil se convirtió en Asociación General de Estudiantes de la FMOc. Si bien en las instancias de gobierno universitario el sector estudiantil alcanzó mayor protagonismo, algunas directivas por carrera perdieron la mística, descuidando el velar por los derechos del estudiantado y el desarrollo universitario, y se dedicaron más a eventos sociales y económicos. Incluso AGEFMO hizo actividades económicas de subsistencia. Después, por razones coyunturales, surgieron otras organizaciones docentes y estudiantiles que desaparecían una vez pasados los comicios internos. Aunque AGEFMO se plantea como una
asociación general, con pensamiento de izquierda, parece no lograr legitimarse al no aglutinar a representantes estudiantiles de las diferentes carreras.
La asociación de docentes ASAUES fue fundada legalmente en 1999; más adelante, como resultado de oposiciones políticas internas, otros docentes formaron ASPAUES.
La FMOc es el principal centro de estudios de la zona occidental de El Salvador, con unos 10,000 alumnos inscritos en diferentes carreras.
Aunque en 2001-2002, los edificios del campus de Santa Ana, fueron ampliados por iniciativa de la Rectora María Isabel Rodríguez, y posteriormente se construyeron nuevos edificios para aulas, falta mayor desarrollo infraestructural para satisfacer las necesidades dela FMOc.
El MAU, una organización que dice ser de izquierda, apareció como base de apoyo a las actuales autoridades, quienes le dotaron de un espacio destinado a establecer una oficina para la defensa de los derechos del estudiante. El MAU busca adeptos en estudiantes de nuevo ingreso, quienes si acaso tienen claridad respecto a la política nacional o municipal, no la tienen respecto a la política interna de la Facultad, por lo cual su voto puede ser inducido. Ahora el sector estudiantil del MAU expresa interés en una campaña en la que se respete a las opciones democráticas, en el proceso de elección de rector, vicerrectores, decanos y vicedecanos que se realizará en este año, y que los participantes deberán ofrecer propuestas de desarrollo institucional y no libelos en contra de sus contendientes. Se han formado o se están formando agrupaciones de docentes que impulsarán a candidatos a decano y vicedecano, o que están interesados en la transparencia de los procesos. El recientemente creado movimiento Universidad Para Todos, aglutina a un sector de la población docente y a estudiantes interesados en promover la inclusión de todos los sectores en el desarrollo universitario, siguiendo ciertas líneas estratégicas. Otros sectores están impulsando candidatos e incluso hay quienes se autoproponen como candidatos, aun
sin contar con un proyecto de desarrollo universitario y tenderían a
restar votos a quienes aspiran al cambio.
La práctica permitirá saber si los sectores estudiantiles y docentes, están realmente dispuestos no sólo a respetar el reglamento electoral de la UES, sino también a realizar una campaña que refleje el profesionalismo lógico en una magna casa de estudios. Se espera quelas buenas intenciones de quienes hoy se manifiestan, y las de quienes participen en el proceso, se traduzcan en un ejercicio electoraldemocrático participativo, que impulse proyectos de desarrollo de la universidad, que el proceso no se convierta en una lucha cruenta por el poder interno, que no se fomente el clientelismo político (que no se compren adhesiones con plazas o estímulos). Los profesionales de la universidad, los egresados y los estudiantes, deben destacar por sus méritos académicos y laborales y no por su cercanía o coincidencia ideológica con las autoridades. Cabe esperar que las nuevas
autoridades se apeguen a un proyecto de desarrollo, respaldado por la comunidad universitaria, que se eviten las prácticas revanchistas o excluyentes, y que se trabaje con responsabilidad social.
La UES y la FMOc, tienen mucho que mejorar no sólo en la docencia, sino también en la proyección social y en la investigación, pero eso se imposibilita si no se comparten objetivos y esfuerzos, y si no se supera la visión de que el quehacer universitario se reduce a dar clases y a graduar profesionales, tras superar exámenes y trabas administrativas. También es necesaria una visión universal y pluralista propia de las universidades y de la democracia. Si se teme analizar y emitir juicios cuando se nos niega el derecho de libre expresión de las ideas, cuanto más difícil es el accionar social bajo el peso de los sectarismos políticos, en cualquier escenario en el que
la detentación se imponga.
Santa Ana, 1 de abril de 2011
……………………..
Jorge Ismael García Corleto es escritor, dirige el Grupo de Actuación
Teatral de Occidente (GATO), es licenciado en Psicología, y en
Educación y Master en Educación Superior, es docente en el Centro
Escolar INSA y en la Facultad Multidisciplinaria de Occidente de la
Universidad de El Salvador, en Santa Ana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario